miércoles, 7 de noviembre de 2012

ELS SEGADORS DE ESPAÑA, por Javier




Dice Rosell, el del Barça, en su organización de las cosas, porque ahora a muchos catalanes, no a todos, les ha dado por organizarnos la vida a los demás así, sin anestesia, que quiere una liga de Primera División con dieciséis equipos de los que bajarían cuatro a Segunda que a su vez estaría formada por dos grupos de dieciséis, es decir, por treinta y dos clubes de otras tantas ciudades que se partirían la cara por jugar contra el Barça del amigo Sandro. Y todo para que la Champions pueda acoger hasta sesenta y cuatro equipos, el doble de los que tiene ahora.            
            Está claro que tonto no es el President, aunque trate a los demás como tales, y como buen catalán nacionalista sabe que la pela está en Europa y no en la decadente e incómoda España. Sabe, como sabemos todos, que tal y como están las cosas su Barça nunca caerá en los cuatro puestos de descenso y que jamás conocerá qué significa jugar en Segunda con otros treinta y un clubes de perfil miserable. Tampoco es que le importe mucho el continente, pero está seguro de que cualquier mediocridad centroeuropea pagará por ver a sus vedettes blaugranas mucho más que la gente de Asturias, Andalucía o Castilla, cargadas de parados y tal vez de prejuicios. Por eso quiere sesenta y tres rivales para su Barça, buenos o malos pero no españoles de medio pelo. Bueno sí, Valencia, Sevilla, At. Madrid y sobre todo Real Madrid le valen por lo que valen, aunque le molesten un poco.
            El iluminado blaugrana, otro más, como el ‘President de tots’ que pese a llamarse Más no hace sino restar para que le salgan sus cuentas, quiere mandar a España entera a Segunda División. Artur pretende lo mismo convencido como está de que sólo ‘Catalonia’ es sinónimo de Primera. Uno actúa por la vía deportiva y otro por la política. Y ahí andan los dos, entretenidos.
            El himno catalán ‘Els Segadors’ (los Segadores) les viene como anillo al dedo al dúo de presidents, porque con la hoz bien afilada quieren limpiar el fútbol español de malas hierbas donde, por cierto, entramos de lleno los almerienses. Claro que, qué más da si al fin y al cabo y pese a las intenciones de Artur y Sandro, se cuentan por miles los ciudadanos de Almería capaces de enfundarse la camiseta blaugrana y partirse la cara con quien sea en nombre de las siglas FCB y dejarse la garganta gritando Bar-ce-lo-na mientras vapulean a ‘su’ Almería en plena Vega de Acá, sí, sí, al lado de El Puche. Pues eso, que al final van a tener más razón que un santo los segadores.
 




(Artículo publicado en diario Ideal, sección Deportes, el día 6 de noviembre de 2012)









1 comentario:

  1. Te felicito, aire fresco en esa atmósfera irrespirable, en la que los odiados vacíos de intelecto rinden pleitesía gratuita y enaltecida a su Reich henchido de nacionalismo."Sieg Barsa, Hei Barsa". ¿se Puede alcanzar mayor grado de estulticia?, si, nunca es suficiente.
    Te felicito.

    ResponderEliminar