Alfonso García Gabarrón |
Un
hombre que en esto del fútbol ha aprendido a base de palos, ve venir el siguiente.
Alfonso García está con la mosca detrás de la oreja porque considera que estos
chicos de la Liga y de la Federación se toman su proyecto a coña. Dijo hace
unos días que en la temporada del descenso a Segunda a su equipo le birlaron
quince puntos y que lo pudo demostrar con un video. Ese video existió, los
chicos que mandan en el fútbol se echaron unas risas viéndolo y sólo sirvió
para inflarnos, a los seguidores rojiblancos, la vena esa que va asociada
al cabreo incontrolado. Dice don Alfonso
que no está dispuesto a consentir que suceda otra vez. Me temo, sin embargo,
que consienta o no, el destino de su obra no está en sus manos.
No
le falta razón al presidente para estar enojado. Su equipo encandila con un
juego que nadie ve, por aquello de los horarios estúpidos de una liga venida a
menos, y el azar, algún desacierto propio y un par de errores arbitrales, lo
han mandado al territorio de los olvidados, de donde nunca debió salir, dirán
aquellos chicos.
Pero
no debe enfadarse don Alfonso, más que nada por su propia salud. Dar caña, sí.
Porque a los suyos les gusta ver a su presidente dando batalla por algo que
creen justo, él mismo se desahoga y encima puede llamar más la atención
mediática que el precioso juego de los de Francisco. Servir para algo más, no
servirá. Pero si a su Almería lo van a mandar para abajo a base de collejas, no
está mal que alguna se escape también para los de arriba.
Partido que dio lugar a la reacción de Alfonso García |
(Publicado en diario IDEAL, el día 4 de septiembre de 2013)