jueves, 15 de agosto de 2013

LA LIGA DE LOS ESTRELLADOS, por Javier



                La Liga de Fútbol Profesional y el Consejo Superior de Deportes siguen en el empeño de que la transparencia vuelva a una competición que, me temo, nunca antes conoció. Porque si algo ha caracterizado a nuestro fútbol, al menos desde que un servidor tiene uso de razón, es la desigualdad, la injusticia y la trampa. Por ello, los altos organismos estatales y futbolísticos llevan varios años en busca de la fórmula desinfectante definitiva, al menos eso aseguran.
Guadalajara-Almería. Estadio Pedro Escartín
                Pero cada paso adelante viene precedido por varios hacia atrás. Y cada decisión en pro de la justicia se convierte, por simple agravio, en justiciera. Resulta que nuestro fútbol está podrido, según los organismos encargados de sanear y dar vigor a la competición en nombre de la deportividad y del prostituido fair play, pero a una semana de comenzar un campeonato que se auguró limpio, se ha amagado mucho sin terminar de actuar, se ha amenazado con el mismo vigor con el que se ha encogido el brazo a la hora de ejecutar y todo ha quedado, más o menos, como estaba. Sólo el débil Guadalajara, ahora en Segunda B, se ha llevado el bofetón limpia conciencias y su destierro será el argumento de aquellos que carecen de valor y tal vez de criterio para hacer valer sus propias palabras, vacías, por cierto. La espera del Alcorcón, sin ir más lejos, con el tinglado que conlleva esa incertidumbre que afecta a otros clubes, a falta de unos pocos días para abrir el chiringuito liguero, es otro motivo más para desconfiar de aquellos que exigen fe ciega en la pureza de su obra.
                Y en la UD Almería, en su convicción de que siendo honestos y honrados tendrán ganado el favor de quien decide el destino, deberían tal vez proteger menos sus cuentas como sus cogotes donde les darán, cuando sea su turno y sin compasión alguna, la colleja ejemplificadora de nada. Como si lo viera venir.

(Publicado en diario IDEAL el día 14 de agosto de 2013)                  

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